Por la 18º fecha de la Superliga, Racing Club visitó a Argentinos en su difícil reducto de La Paternal y no pudo pasar de un pálido empate al que llegó de casualidad por medio del juvenil Tiago Banega, aunque al final, casi lo gana.
La Academia visitaba al bicho con la férrea idea de levantar cabeza y volver a ser, aunque sea, un esbozo de lo que fue el campeón. Beccacece movió el dibujo de un 4-3-3 a un 4-4-2 y metió a Marcelo Díaz y a Jonathan Cristaldo para acompañar a Licha López.
Ya a los 5′ minutos, Argentinos le dio a entender que otra vez no había acertado en el planteo y en los nombres y se puso en ventaja a través de Edwar López, que empujó un centro desde la izquierda.
De todas formas, Racing tuvo momentos en los que pudo hacer prevalecer la circulación y llegar por las bandas, en especial por el lado de Fértoli, pero nunca pudo lastimar al arquero Chávez.
En el ST, Beccacece se la jugó por Banega en lugar de Díaz y al pibe no le pesó la responsabilidad de hacer jugar al equipo a su ritmo, obviamente, si bien no decepcionó, se nota que aún le falta para asentarse en primera, pero punto a favor del DT y crédito más que abierto para el jugador.
A los 69′ el pibe Banega nos dio el empate luego de un córner de Rojas al primer palo y el juvenil los durmió a todos en el primer palo para lograr la igualdad.
Argentinos entró en una nebulosa que hizo que el partido se haga trabado, luchado y en ese empantanamiento, Racing supo moverse mejor y casi lo gana. Cvitanich avisó primero casi ganándole a Torren en un pelotazo y en la siguiente, sí le ganó y al encarar al golero, fue Chávez quien venció y salvó al bicho.
Fue empate, no sirve en cuánto a los números, pero se vio un Racing algo mejorcito a lo visto ante los tucumanos, era clave no perder para no llegar con una derrota a cuestas al clásico ante Independiente del domingo próximo.
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